23 nov 2010

Le petit lapin

Hace un tiempo me regalaron un conejo que no me terminaba de convencer así que dándole vueltas a mi cabecita decidí deshacerle y volver a hacerlo pero con telas diferentes, para ver como quedaría. Además, quería ver si era capaz de rehacerlo. Romper algo es sencillo pero volver a armarlo es otra cosa. El proceso resultó se más sencillo de lo que esperaba y bueno, después de terminarlo lo mejoré un poquito, le dí un toque diferente. Pena que no sacará fotos del conejo anterior. Este es el nuevo conejo.


Una vez terminado el conejo se lo dí a Sofí para que jugará con él y bueno, además de que le gustó muchísimo, le arrancó una pata, así que otra vez me toco coserlo. Ahora espero que no lo vuelva a romper, me aseguré de que no lo hiciera.

No hay comentarios: